Un paso a la vez.

¿Alguna vez te has preguntado cómo aprendiste a organizarte?
Me refiero a establecer prioridades, a generar códigos de colores o numéricos que te sirvieran de guía, a diseñar horarios o herramientas que te ayudaran a ser más productivo.
¿Recuerdas si alguien te enseñó a hacerlo? O simplemente “fuiste aprendiendo cosas ” en la escuela y después en cada trabajo.
Tal vez sí tuviste un guía en este proceso, especialmente durante los años de educación básica y de secundaria, porque en los años que siguen, a veces ya hacemos las cosas de manera automática.
O quizá no tuviste un guía y solo fuiste siguiendo la corriente y haciendo lo que los demás hacían.

Ambos escenarios son normales, como también es normal que haya personas a las que “no se les da” la organización y habemos quienes amamos crear sistemas y estructuras que nos ayuden a ello.
Haciendo una analogía, creo que los que amamos crear sistemas y estructuras podríamos ser “los arquitectos de la organización.”
Lo cierto es que en términos generales nadie nos enseña a organizarnos para hacer mejor nuestro trabajo y sin embargo habemos quienes podemos brindar asesoría de alineación Agile para lograr ese objetivo.

La mayoría de mis clientes son verdaderamente excelentes en lo que hacen y sus negocios y empresas son muy rentables, hay utilidades reportadas de forma constante y también una sensación permanente de tensión porque “hay mucho por hacer y no saben cómo organizar a sus equipos para que sean más productivos.”
De nuevo esta palabra: Productividad…
El punto es, que considero necesario, importante y urgente MODIFICAR el concepto de productividad que hemos venido aplicando desde de hace tres siglos, con la revolución industrial.
El objetivo de ese momento era “producir más,” aprovechar las innovaciones que se estaban dando y hacer “más“ con el avance industrializado y mecanizado.
En cuanto al tema de las ocho horas laborales… bueno ese es sin duda, material de un siguiente post.
¿Te das cuenta que estamos en el siglo XXI y el estándar de productividad sigue siendo el mismo? “Hacer más.”
Esa es la constante en las solicitudes de mis clientes cuando tenemos un 1st approach: Que sus equipos sean más productivos, es decir, que hagan más.
Así que cuando empezamos a trabajar y pregunto:
¿A qué te refieres con más? Las respuestas varían, van desde: “Que se organicen mejor para que hagan más cosas en el día”
“Que saquen más pendientes en menos tiempo”
“Que terminen más rápido su trabajo”
“Que hayan más ventas, clientes, etc.”
“Que hagan más”
Sin embargo, una vez que comenzamos la alineación de Agile con los team leaders, los directores, coordinadores o cabezas de grupo y vamos trabajando en los conceptos, ese “más” empieza a cambiar por “mejor.”
En el proceso, también descubren que lo que no pasa en la cancha de juego es en gran parte, porque no hay claridad en la planeación de las tareas y en la transmisión de las mismas por parte de ellos. Así que la alineación empieza a tener forma y dar dirección.
Y cuando trabajo con los equipos en la alineación y en el proceso van descubriendo que el tema cuantitativo es igual de importante que el cualitativo, empezamos a encontrar el balance necesario para todos los colaboradores. No importa el lugar que ocupen en la organización. Se están alineando bajo los mismos códigos y se nota y se siente.

Agile está conformado por varias metodologías, así que la elección de la más adecuada o recomendable depende del diagnóstico que se haga.
Ya sea SCRUM Marketing, KANBAN o SCRUMBAN, bien aplicada y con el conocimiento necesario del contexto y las necesidades de la organización, brindará resultados satisfactorios en todos los niveles de la organización, ayudará a mejorar la productividad y al mismo tiempo, le dará balance todos los colaboradores.
El bienestar es una de las cosas que más me interesan a nivel personal y por ello comencé a alinear equipos con Agile, para darles herramientas que los ayuden a auto organizarse, a ser autosuficientes e independientes.
En un mundo como el de hoy, donde el objetivo es el balance en el desarrollo del individuo, es importante ser conscientes de que la parte cualitativa y la cualitativa son igual de valiosos en el día a día.
Si quieres saber cómo empezar a ser Agile, estoy a tus órdenes.