Cada paso es un avance.

Durante las semanas recientes hicimos un ejercicio de observación y descubrimos algo muy interesante:
Sin importar LO BIEN que alguien haya hecho las cosas, lo primero que ve esa persona, es lo que no hizo, lo que le faltó.
Cada vez que alguien lograba algo y recibía una felicitación, un comentario positivo o un reconocimiento de un compañero de equipo, la respuesta era similar: «Gracias, pero le falto tal cosa» o «Gracias, se hizo lo que se pudo»
¿Te reconoces diciendo algo así?
¿Te ves detectando «lo que te faltó para que fuera perfecto»?
Pues bueno, esa modestia que nos inculcaron en todos lados: casa, escuela, jefes, etc. Es inútil si lo que quieres es fortalecerte como persona y como profesionista.
Lo he visto en mis equipos de trabajo. Paso a paso han ido aprendiendo a «dejar la modestia» a un lado y a aceptar ¡que son buenos en su trabajo!
Han aprendido a celebrar cada logro por pequeño que parezca y a reconocerse a sí mismos -primero por un instante y después de forma más constante- que son brillantes, que son buenos, que saben lo que hacen, ¡que son valiosos en el team, muy valiosos! Y por lo tanto, que son individuos muy valiosos.
Ya sea que trabajes en una organización o por tu cuenta, que estés pensando en cambiar de empleo, terminando la carrera, un diplomado o empezando a estudiar, reconoce tus logros. Siempre. Todos son importantes.
Por supuesto, hay unos más evidentes o impactantes que otros y sin embargo, esos que consideras «más importantes,» son la suma de todos los pequeños logros que fuiste cosechando paso a paso.
Somos seres orgánicos en constante evolución. Todos los días aprendemos algo, aplicamos algo de lo que aprendimos recientemente, tomamos decisiones, enfrentamos algún temor, resolvemos alguna preocupación que teníamos, empezamos un nuevo camino, buscamos alternativas, etc.
Todos los días están llenos de logros. Aprende a reconocerlos.
¿Y lo mejor de todo? Es más que suficiente con que tú te lo digas a ti mismo, con que tú lo veas.
Porque la opinión más importante, es la que tienes de ti mismo.
LVM / asesora de alineación para mejorar la productividad.