Diciembre 2024

Video: Sum Of Talents

Yo soy_______

Imagen: biblioteca de medios Sum Of Talents

Cuéntame: ¿Qué fue lo primero que vino a tu mente? ¿Tu nombre? ¿Quizá tu actividad profesional? O una característica de tu personalidad…

Es interesante la forma en la que cada uno completamos esta oración. Depende de muchos factores la respuesta que damos y sin embargo, desde mi perspectiva, aquí y ahora, yo diría que eres un talento.

Sea lo que sea a lo que te dediques, la edad que tengas y dónde te encuentres, sé que eres talentoso. Todos lo somos.

Algunos “descubren” su talento antes que otros y sin embargo, en el proceso, en el camino, todos vamos identificando nuestro talento: “Eso” que tenemos dentro, que se nos da con facilidad y que hacemos con naturalidad.

Y si por alguna razón aún no estás seguro de cuál es tu talento, cierra los ojos y siente en el fondo de tu corazón qué es lo que disfrutas hacer, qué es lo que te apasiona y a lo que podrías dedicarle horas y horas sin sentir que pasa el tiempo. Ese es tu talento.

Olvida las métricas económicas o sociales. El talento que tienes es el que te guía, el que te va abriendo paso y te va señalando el camino de una u otra forma.

Así que completa la oración:

Yo soy_________

Y dime quién eres, porque estoy segura de que detrás de la elección de tu actividad profesional, de trabajo o estudios, está tu talento y este espacio es para ti, porque la vida es una Suma de Talentos.

El secreto está en conocerte mejor a ti mism@

Lo que funciona para otros, no necesariamente funciona para ti y eso aplica a todo: ritmo de trabajo, organización de tus actividades, alimentos, ejercicio, ritmo de aprendizaje, etc.

Me parece que no hay una sola forma de hacer las cosas. No creo que haya una verdad absoluta en cómo deben hacerse las cosas y no me refiero a cuestiones espirituales, eso es otro tema.

Hablo de que cada uno de nosotros tenemos una perspectiva de las situaciones y que nuestra forma de resolver se relaciona con nuestra edad, nuestra experiencia, nuestra área de trabajo y nuestras vivencias, por citar algunos puntos.

En algún lugar leí que hay más de 101 maneras de lavar los platos y si eso aplica para una actividad tan sencilla y cotidiana, imagina la cantidad de opciones para realizar una propuesta, para hacer un logotipo, decorar una casa, etc.

Así que me parece que el secreto está en observar a los demás, escuchar la forma en la que resuelven y adoptar y adaptar lo que funciona para ti. Nadie se conoce mejor que tú.

Muchas personas funcionan bien desde las 04:00 am y sus actividades empiezan maravillosamente a esa hora. Genial. Funciona para ellos.

Sin embargo hay otros que no pueden empezar a esa hora, porque su bioritmo es otro y entonces para ellos es mucho mejor iniciar actividades a las que 10:00 pm porque son nocturnos y ese horario es perfecto para estar atentos a lo que hay que hacer en el transcurso del día. Funciona para ellos.

Analiza -y descubre- qué es lo que funciona para ti. Dedica tiempo a conocerte mejor, pon atención en lo que te mueve y en lo que rechazas de forma inmediata, pregúntate por qué piensas o sientes eso y ve encontrando respuestas útiles para ti, para ajustar tu forma de actuar o de pensar.

Conocerse a uno mismo es un camino que dura toda la vida y resulta grato y muy interesante. O bueno, puedo decir que hacerlo, funciona para mí 😉

Feliz inicio de mes de agosto 2020

Foto: Pinterest

¿Cuál es tu propósito en la vida?

Independientemente de la escolaridad, la edad, el puesto, la ocupación o a lo que te dediques… ¿Alguna vez te has preguntado cuál es tu propósito en la vida?

Creo que somos mucho más que un título, un puesto o una ocupación. Formamos parte del universo y todos -absolutamente todos- estamos aquí para aportar algo importante al mundo.

Somos parte de un sistema en el que cada pieza tiene una razón de ser y cuando descubres tu propósito, cuando después de mucho o poco tiempo -dependiendo de lo que a cad uno nos toca vivir- entiendes para qué has venido a este mundo, entonces todo tiene sentido.

Estamos viviendo momentos de cambio, lo que era familiar ha dejado de serlo y nos estamos reinventando día con día y en ese proceso por el que la humanidad atraviesa, preguntarte cuál es tu propósito en la vida quizá te ayude a encontrar el rumbo que por momentos, parece que hemos perdido con esta pandemia.

Cronos, Aión y Kairos

Los dioses griegos que hoy más que nunca, viven entre nosotros.

El tiempo moderno, ese que transcurre veloz y que nos toma por sorpresa cuando se nos ha ido la mañana haciendo tareas o cosas del trabajo, es ese al que hemos dedicado toda nuestra atención de manera absurda:

Los griegos lo llamaron Cronos y es ese tiempo lineal que nos lleva de un punto a otro de manera irreversible, segundo a segundo hasta contar años. Planteándonos sueños y objetivos a futuro, uno tras otro, a veces, mirando atrás y otras veces sin hacerlo,  porque tenemos la absoluta certeza de que no hay forma de «regresar el tiempo» y que solo nos queda continuar con el piso firme del hoy y la esperanza del mañana.

Aión ES. No nace ni muere, porque él es el dios del tiempo eterno, del tiempo divino. Es el que nos habla desde lo más profundo de nuestra alma y nos permite darle sentido a nuestro camino, a nuestras acciones, porque recorrer el camino que hemos elegido tiene sentido para nosotros y eso es más que suficiente.

Kairos es el dios joven y veleidoso, el que no exige nada, porque simplemente es la oportunidad que pasa por un segundo a nuestro lado y si no la hemos visto y no la hemos aprovechado, ese instante preciso, desaparecerá posiblemente sin volver a presentarse. Es ese pequeño momento en el que la ocasión se presenta y si la abrazamos, nos catapulta al futuro que soñamos o a un momento completamente inesperado.

Los tres son importantes, los tres juegan un papel crucial en nuestras vidas y es necesario atenderlos a todos por igual. Darle balance a nuestra vida significa no correr al ritmo que nos marca Cronos, escuchar lo que nos susurra Aión y estar siempre atentos a la presencia de Kairos.

Foto: Google Foto: Google

 

La importancia del descanso.

Para una vida mejor.

En un momento como el que vivimos, el concepto de «descanso» puede sonar lejano para muchos.

Estamos conectados todo el día a las computadoras y los dispositivos, ¡trabajamos en línea el doble de lo que normalmente lo hacemos! y los comentarios recurrentes que escucho son: «estoy agotado» «trabajo más que nunca» «No puedo desconectar, me llaman a toda hora»

Es cierto, estar al alcance de un click hace que todo sea hasta cierto punto diferente. Sin embargo hay algo que no podemos hacer a un lado: descansar.

No solamente es importante. Es necesario para la salud.

Y por supuesto, te ayuda a elevar la productividad

Así que si te sientes muy cansado, revisa cómo estás distribuyendo el tiempo, cuántas horas estás durmiendo, cuántas estás conectado y encuentra un equilibrio. Te sentirás mejor y rendirás más en todo lo que tienes que hacer.

Foto: Pixabay. Baby and Dad
Foto: Pixabay. Baby and Dad

#SM #SumaDeTalentos #mayo2020 #descanso #amor

Vivir plenamente es…

La importancia del ahora.

Pase lo que pase.

En medio de esta contingencia global, una de las frases que escucho últimamente y de forma constante es “Cuando todo esto termine”

Me queda claro que en parte, es uno de nuestros mecanismos de defensa, por lo sorpresiva y abrumadora que es la situación y entiendo también, que es nuestra esperanza la que habla, volando mental y emocionalmente por encima de este panorama, buscando sentir paz, vislumbrando un mañana sin el estrés que estamos viviendo.

Sin embargo, esta maravillosa capacidad que tenemos de adaptación, me parece que puede ser engañosa o poco útil, para aprender las lecciones importantes de la vida y esta pandemia es una de ellas.

Si nos “desconectamos” del hoy y lo vivimos pensando en “cuando todo esto termine”, entonces no hemos aprendido absolutamente nada. Lo único que hicimos fue cambiar de escenario, adaptarnos al nuevo y dejar de apreciar lo que tenemos.

Si miramos hacia atrás, antes de esta emergencia sanitaria y de tener que estar en casa resguardados, la dinámica mental era la misma:

“Cuando termine este proyecto, cuando ahorre lo suficiente, cuando tenga tiempo suficiente, cuando sean las vacaciones…”

Vivimos con la mente, el corazón y las emociones en el futuro, mientras nuestro cuerpo está en el presente.

Es importante valorar el hoy / ahora, porque – en el remoto caso de que no nos hayamos dado cuenta- alrededor del mundo entero hay miles de muertos que ya no lo tienen. Miles de familias que quisieran estar encerrados en sus casas con ellos, trabajando vía remota, oyendo las mismas historias y jugando los mismos juegos, pero juntos.

¿Qué es lo que necesitamos para entender que lo único que tenemos es este instante?

¿Qué más nos hace falta?

Porque -como me dijo hace unos días mi jefe y amigo a quien respeto mucho- si no aprendemos de esto, ya no aprendimos de nada.

Así que pensar en el futuro es bueno. Planificar es bueno, pero por momentos. Con la conciencia de que esos planes son frágiles mientras no estemos empezando a ejecutarlos, porque todo puede cambiar en un instante y no necesariamente para mal. La actitud positiva ante los retos, hace que podamos enfrentarlos con mayor facilidad.

Lo que tenemos es este momento, este instante. El desayuno caliente, una casa, trabajo vía remota, un celular, luz, agua, sol, aire, amor, pareja, familia, amigos, ganas de regresar a la vida offline, ganas de abrazarnos y reunirnos, ilusiones y sueños. Hoy.

El mañana es una esperanza que se construye hoy.